Cuando un autor rolero y amante del género de terror se propone hacer un juego de mesa, ocurren cosas como Espinas, un juego donde narración, inmersión y diversión comparten un oscuro ménage à trois. En esta ocasión José Lomo (Fundido en Blanco, Antiguo y Colosal) nos ofrece una experiencia narrativa que te dejará aterrorizado.
Este juego de cartas narrativo con mecánicas basadas en la memoria y la atención a los detalles nació para amenizar un encuentro durante una noche de difuntos (Halloween, para los que prefieran su acepción anglosajona). Algunos de los participantes habían jugado a rol o juegos de mesa alguna vez, pero otros no habían sentido hablar de un juego narrativo en su vida, así que Espinas debía ser asequible, rápido de asimilar y poner en práctica. Los jugadores de aquella primera sesión se sentaron alrededor de un extraño tablero, eligieron personaje y recibieron su primera mano de cartas sin saber que se estaban adentrando en las entrañas de un sanatorio poblado de sombras y pesadillas.
Superado aquel sangriento bautismo inicial, el borrador del juego dio paso a la primera edición de Espinas, publicada originalmente por El Autómata en formato print & play, donde ya se asentaban los cimientos que le otorgarían su personalidad distintiva. En su primera versión, la acción se situaba en el inquietante sanatorio del tórax de Terrassa, uno de esos lugares marcados en el mapa de los edificios malditos y célebre por los extraños fenómenos que muchos de sus visitantes han relatado. El propio autor realizó un par de incursiones al sanatorio, durante la época en la que aún estaba abandonado. Algo tuvo que traerse de allí. Algo que le impulsó a crear Espinas.
Pero aquello que habita entre los muros del viejo hospital nunca parece saciado del todo, así que desde Nosolorol hemos querido diseñar una nueva edición, que goza de un reglamento más consolidado y nuevo arte original que nos sumergirá como nunca en la atmósfera del juego. Otra novedad es que hemos deslocalizado el juego para dar cabida a cualquier sanatorio que la mente de los jugadores sea capaz de recrear. Ese hospital abandonado cerca de tu ciudad o en tu película de terror favorita puede convertirse en vuestra inspiración inicial. Todo ello en un formato físico que hará las delicias de cualquier storygamer.
Tras la publicación de El club de los Martes (y su spin-off, Distopía), Nosolorol da un nuevo paso en el mundo de los juegos narrativos de tablero con Espinas, del que muy pronto compartiremos más detalles.
