La publicación de Fundido en Blanco, primer suplemento oficial para Cultos Innombrables (con permiso de la pantalla), está a la vuelta de la esquina, y viene repleto de oscuras tentaciones. La primera de ella es deciros que, tal vez, se trate del suplemento más radical que ha publicado Nosolorol hasta la fecha; pero nos gusta huir del sensacionalismo barato cuando hablamos de nuestros juegos, así que podemos dejarlo en que es un contenido fuertecito, cargado de amoralidades y de recovecos malsanos.
Como iremos desvelando en próximos comunicados, todo aquello que rodea a la familia White es truculento y visceral. Sucio y maloliente, como agua estancada, pero fascinante al mismo tiempo. Otra de las tentaciones es explicarte todos los detalles de golpe pero este es un plato de digestión lenta: merece ir cortándose a trocitos, masticarlo despacio. También sería genial ofrecer un vistazo al gran secreto de los White, aquello que se esconde tras su apariencia de paletos del desierto y que los hace tan y tan interesantes. No debemos caer en ninguna de estas tentaciones antes de tiempo, por el bien de vuestra Estabilidad Mental.
A nadie se le escapará que las costumbres de esta familia endogámica y caníbal tienen su fuente de inspiración en grandes clásicos del género como La matanza de Texas, Las colinas tienen ojos, Granja maldita u otros films más recientes como Wolf Creek, The Descent o el cine de Rob Zombie. No obstante, la chispa que prendió el fuego fue un rol en vivo que algunos de los integrantes de Nosolorol pergeñaron hace ya unos años y que caló hondo en sus participantes, hasta tal punto que los White se instalaron en esta casa, sin remedio y se fueron infiltrando en algunas publicaciones de Nosolorol. Sin ir más lejos puedes encontrar la hoja de un personaje White en Fragmentos o la descripción de esta familia, como un auténtico culto oficial, en el básico de Cultos Innombrables.
Pero pedían más. Los White siempre tienen hambre, y tal vez por eso Manuel J. Sueiro, autor y director general de Nosolorol, se ha preocupado de irlos alimentando, a escondidas, durante todos estos años. Cuando quiso darse cuenta, la familia y su granja habían crecido lo suficiente como para pedir un lugar preferente en el universo de Cultos Innombrables. Quieren que les hagas una visita. Les encantan los extraños.
Tal vez por no quedarse a solas con esta estirpe enferma, Sueiro pidió algo de compañía a José Lomo y entre ambos trataron de dar testimonio de lo acontecido en esa perdida granja de Nuevo México. De la unión de estas dos mentes pensantes, y posiblemente igual de depravadas que los White, nace Fundido en Blanco, un suplemento que ha puesto toda la carne en el asador y del que iremos desgranando detalles poco a poco, mientras se ultima su diseño. ¿Oyes cómo alguien afila cuchillos en el sótano?
