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¿Nunca has jugado a rol antes? ¡Zuzumba, eso no puede ser! Para remediarlo, en este artículo te explicamos cómo jugar a Hora de Aventuras: Juego de Rol. Abre la puerta a un mundo de fantasía y diversión jugando a rol ¡Te esperan horas y horas de aventuras en el País de Ooo junto a tus familiares y amigos!
Para jugar al rol es importante que al menos la persona que vaya a ser el director de juego conozca bien cómo se crean los personajes, cuáles son las reglas del juego, cómo es el País de Ooo y cómo realizar su labor como director de juego. Sería bueno que los jugadores también conozcan al menos cómo se crean los personajes y las reglas, pero si no es así, el director de juego siempre puede explicárselo.
Una vez que se sabe crear personajes, el siguiente paso es que los jugadores creen sus personajes jugadores. Alguien impaciente suele usar personajes pregenerados, pudiendo elegir uno de los muchos personajes de la serie que aparecen en el libro de Hora de Aventuras: Juego de Rol. En cambio, los jugadores más imaginativos, o veteranos suelen preferir crear su propio personaje. Sea un personaje pregenerado o uno de su propia invención, cada jugador necesita tener una hoja de personaje ante sí. Esa hoja representa lo que cada personaje es capaz de hacer y lo que no. El director de juego no necesita esas hojas, porque como representará a todos los personajes secundarios, enemigos, etc. no daría abasto para consultarlos todos.
En su lugar lo habitual es que el director de juego anote la información que necesite entre sus propias notas, para localizarla de forma más sencilla. La primera vez que alguien juega al rol, o si tenéis poco tiempo para preparar la partida, es recomendable usar personajes pregenerados, pero conforme os familiaricéis con el juego veréis que es muy divertido quedar todos juntos y crear personajes que se complementen.
¿Qué sería de Finn sin Jake? ¿Y de la Princesa Chicle sin su amiga Lady Arcoiris?
Antes de empezar a jugar es importante que el director de juego haya preparado una aventura. Una aventura o partida es una historia que los personajes jugadores, como héroes, van a resolver. Es recomendable que la primera vez que alguien haga de director de juego utilice una partida que haya escrito otra persona, como la aventura de iniciación que incluimos en Hora de Aventuras: Juego de Rol. En posteriores ocasiones, el director de juego puede lanzarse a desarrollar alguna idea de aventura, te ofrecemos un montón en el juego, o crear las suyas propias siguiendo los consejos incluidos en el capítulo 5 del libro.
Las aventuras solamente las debe leer el director de juego. De otra forma, los jugadores sabrán lo que pasará y eso resulta muy aburrido. Lo divertido es llevarse sorpresas, así que deja que el director de juego te sorprenda.
Una vez que los jugadores tienen personajes que interpretar y el director de juego tiene una aventura lista, habrá llegado la ¡hora de aventuras! Reuníos quienes vayáis a jugar y acordad un día en el que podáis reservar un buen rato (digamos que un par de horas como mínimo) para dedicarlas al juego. Aseguraos de que podéis disponer de un sitio donde sentaros y conversar tranquilamente, además de tomar notas y tirar dados.
El tiempo que vais a dedicar a jugar lo decidís vosotros, colegas. Una partida de rol molona suele durar un par de horas, pero si queréis podéis jugar partidas más cortas o más largas. Acordaos de llevar un buen puñado de dados, lápices y papel para tomar notas. Ahora es momento de que el director de juego actúe como un narrador, describiendo el mundo que rodea a los protagonistas, lo que sucede en el escenario, etcétera.
Es como si fuera el escritor de un libro, porque debe describir lo que se encuentran los personajes jugadores, presentarles la aventura e interpretar a todos los demás personajes (que vamos a llamar ya personajes no jugadores). Por su parte, los jugadores se centran en interpretar a su personaje, hablando como hablarían ellos y describiendo sus acciones. Es importante que los jugadores entiendan que no deben tomar únicamente decisiones lógicas y racionales para resolver los problemas, sino que deben comportarse como lo haría su personaje en esa situación, como hacen los actores. De esta forma, alguien muy reflexivo puede interpretar a un bárbaro propenso a la acción y alguien muy hablador, a un pingüino callado.
La narración del director de juego tiene que ser interactiva: debe permitir que los jugadores decidan lo que hacen sus personajes y reaccionar a lo que le digan.
Por ejemplo, si los personajes jugadores hablan con un habitante de Chuchelandia, son los jugadores quienes deben hacer las preguntas (por ejemplo, «¿Dónde estuviste la otra noche?») y el director de juego quien debe responder como lo haría la chuche con la que están hablando (con miedo, desafiándolos…, dependiendo del caso).
Un jugador de rol debe intentar interpretar bien a su personaje y describir cómo se comportaría este en la situación concreta en la que se encuentran. No juegues a ganar: no hay ganadores ni perdedores en Hora de Aventuras: Juego de Rol. Lo que hay es un montón de gente pasándoselo bien y contando una historia interactiva entre todos. Si a tu personaje le salen mal las cosas y todos os reís del resultado, entonces lo estás haciendo genial.
Cuando en el transcurso de la historia ocurra algo importante, algo que puede definir el devenir de la historia (como por ejemplo, un combate), será preciso recurrir a las reglas del juego y lanzar los dados. Las reglas explican cómo utilizar los dados y las hojas de personaje para saber si se tiene éxito o no en las acciones que emprenden los personajes jugadores. Ningún jugador, incluido el director de juego, debe manipular las reglas a su antojo, sino que se deben utilizar para contar una historia entre todos.
A veces uno no consigue lo que quiere y otras sí. Aunque parezca que es un rollo, lo que hacen las reglas es añadir un poco de azar a lo que sucede, así que hacéis bien en respetar las reglas, sin duda ¡es mucho más divertido no saber qué va a pasar! Cuando lancéis los dados, preparaos para que ocurra lo imprevisible, ¡cómo sucede siempre en Ooo!
La narración fluirá a lo largo de todo el tiempo que queráis dedicar a la partida, normalmente hasta resolver la aventura planteada por el director de juego o alcanzar un punto concreto si es una aventura en varias entregas. Con eso finalizará la historia, guardaréis las hojas de personaje (si es que queréis jugar con los mismos personajes en otra ocasión) y podréis dedicaros a comentar la partida, como cuando uno comenta una película tras verla con sus amigos.
Si tienes más curiosidad por Hora de Aventuras: Juego de Rol, puedes echar un vistazo a artículos que hemos publicado sobre él anteriormente, como este sobre la creación de personajes, o este otro sobre las reglas de juego.
Hora de Aventuras: Juego de Rol, ¡El único límite es tu imaginación, tron!