La torre más famosa de Nosolorol, ahora bajo la nieve

Ya está nevando en la torre del mago más longevo y respetado de Nosolorol Ediciones, El Invierno de Rudesindus está a punto de llegar a nuestras oficinas. Goblop, un viejo conocido que nos recibió por primera vez en La Torre de Rudesindus, y Prisky, que se nos presentó en 2014 en La Primavera de Rudesindus, junto con dos nuevos compañeros de faena, Nesteff y Rudus, nos mostrarán la ahora fría torre.

Prisky: Hola, futuros lutines. Si no habéis estado nunca en la torre de nuestro querido Rudesindus, lo primero que debéis saber es que ¡hay muchas tareas divertidas con las que llenar cada día! Nosotros, y vosotros en cuanto firméis vuestros contratos, nos encargamos de que todo marche bien en la torre y de hacer las tareas diarias cuando Rudesindus sale de casa. Con nuestro pequeño tamaño, tareas como barrer, alimentar al gato o, en esta época del año, descongelar su agua para que pueda beber, se transforman en divertidas aventuras y, a veces, un poco locas por las prisas para tenerlo todo cuando llegue el mago.

Como nos cuenta Prisky, La Torre de Rudesindus es un divertido y sencillo juego en el que cada jugador será un pequeño demonio al servicio del gran mago Rudesindus. Cuando llegas a la torre del mago firmas tu contrato, que contiene en unas pocas frases todo lo que necesitas como ficha de tu personaje. Gracias a esto y a un sistema muy ligero, La Torre de Rudesindus es juego genial para cualquier ocasión. No necesita gran preparación y es fácil de comprender y explicar, por lo que también es el juego que buscas si quieres animar a alguien a jugar al rol por primera vez. ¡Con estos locos lutines, la diversión está asegurada!

La Torre de Rudesindus es un juego de interpretación en clave de humor blanco escrito por Pedro J. Ramos y Manuel J. Sueiro que en estos años ha conquistado a mucha gente por su simplicidad y que ha servido de inspiración para otros juegos, como por ejemplo el exitoso Pequeños Detectives de Monstruos, cuya mecánica es una variante del sistema de La Torre de Rudesindus.

Goblop: No sé por qué has empezado hablando tú, Prisky, si el que manda en la torre y tiene la campana es Goblop. Que sepáis, lutines, que si os atrevéis a firmar el contrato con Rudesindus tendréis que trabajar mucho y hacer todo tipo de tareas. Una vez plasméis vuestro nombre en el papel ya no vale decir aquello de «esto no estaba en mi contrato»; todo lo que haya que hacer dentro de la torre está implícito en el papel que firmáis... y hay cosas que solo sabréis cuando estéis allí. Para que os hagáis una idea de lo terrible que puede ser nuestro trabajo, ¡esta primavera a Rudesindus le dio por encargarnos un ramo de flores y una carta de amor! ¿Te lo puedes creer? Goblop tiene alergia a las flores y... ¿escribir una carta llena de cursiladas? En fin, luego no digáis que no os hemos avisado.

Y así es Goblop, todo un gruñón sin el cual la torre no sería la misma. Como él cuenta, las tareas dentro de la torre pueden ser de lo más variopintas y, como las contenidas en el juego básico ya se nos quedaron cortas, el año pasado comenzamos con la publicación de una colección de suplementos que nos mostrarán cómo cambia la torre según las estaciones. Comenzamos con La primavera de Rudesindus, donde podéis encontrar la primera aparición de Prisky y más lugares propios de esta estación donde llevar vuestras aventuras, además de nuevos personajes que perturban la tranquilidad de los lutines y muchas tareas que realizar. Goblop ya nos ha dado una pincelada, pero no solo hay tareas románticas, en primavera también hay que controlar a los gnomos (cosa que a veces acaba con un ataque a su aldea), también tenemos al bigfoot, Rudesindus a veces encarga que se borren sus pisadas, hay que recoger la miel... y muchas más tareas primaverales.

Tanto La primavera de Rudesindus como el siguiente suplemento, El invierno de Rudesindus, que saldrá a la venta en las próximas semanas, han salido de las locas ideas de David García Martín y vienen decorados, al igual que el básico, con las evocadoras y divertidas ilustraciones de Jaime García Mendoza.

Rudus: Bueno, bueno, pero yo pensé que veníamos a hablar de la mejor época en La Torre de Rudesindus, ¡el invierno! Ahora en la torre tenemos nieve, renos, regalos y... ¡villancicos! ¡Me encantan los villancicos! ¡Si hay una época buena para que te contrate Rudesindus, es ahora!

Nesteff: Rudus, eres un cursi, como te dé por cantarles un villancico te meto dentro del muñeco de nieve para que disfrutes de tu blanca navidad... y no pienso participar en la tarea de sacarte de allí.

No me ha hecho falta presentaros a Rudus y Nesteff, dos nuevos lutines que os acompañarán en las frías aventuras que contiene El invierno de Rudesindus. Este suplemento tiene 32 páginas en blanco y negro que os llevarán a la peculiar navidad que viven Rudesindus y sus lutines. Viene encuadernado en grapa con una portada a todo color, unas medidas de 205 × 265 mm y conservando el estilo de La Torre de Rudesindus y La primavera de Rudesindus.

Este nuevo suplemento está lleno de personajes, ambientes y tareas que os resultarán familiares y algunos os traerán recuerdos muy navideños. Lugares como el Árbol de Navidad o la cueva del Yeti; personajes tan carismáticos como los tres demonios magos Raspar, Melkor y Maltazhar; un viejo lobo con pánico a las niñas con caperuza roja; tareas como las que nos han comentado nuestros amigos lutines relacionadas con el frío, sacar a un lutín del muñeco de nieve, descongelar el agua de Lucifer, llevar mantas a la princesa cautiva u otras más navideñas como preparar los fuegos artificiales o colgar muérdago. Y no pueden faltar algunas más arriesgadas como robar los planes del Grinch o expulsar al Viejo Lobo.

Nuestros amigos esperan que vayáis a ayudarles. Preparad vuestros tres dados de seis caras, una campanilla, un lápiz para firmar el contrato ¡y que comience la diversión!