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Imagina un mundo desierto, donde las ciudades yacen largo tiempo abandonadas por la humanidad y lo que queda de ésta las evita supersticiosamente mientras se refugia en los vastos yermos y en los rincones apartados de ese mundo.
Imagina que esa gente se ha vuelto temerosa ante el mundo que ha quedado, desconocido y peligroso. Animales salvajes, incursores, restos de la antigua tecnología, y sucesos todavía más extraños.
Deja de imaginar. Enfréntate al nuevo mundo.
Frank Guerra ha desarrollado tres exitosas aventuras para Nosolorol Ediciones, la aventura de investigación y terror El Maizal, y dos one-shots para sLAng, Proceso Oscuro y Oro en plomo. Sin embargo, los que conocemos a Frank sabemos que siente debilidad por las ambientaciones de carácter futurista, especialmente aquéllas que exploran la relación entre el hombre y la máquina. Por ello, cuando Frank llegó a nosotros con Postapocalyptica: Última espera, una historia ambientada en un futuro devastado, no pudimos menos que correr a leerla con avidez.
Al igual que ocurría con El Judío Errante de Diego López, Postapocalyptica se sustenta en el sistema Hitos, ofreciendo entre sus páginas todo lo necesario para jugar la partida, sin necesidad de otro material más allá que unos cuantos dados de diez caras.
Pero, ¿Cuál es el argumento de la historia? Sin entrar en demasiados detalles, los protagonistas de Postapocalyptica son jóvenes miembros de la comunidad de Última, uno de los grupos de supervivientes en este mundo devastado. Los protagonistas se verán obligados por las circunstancias a salir al inhóspito mundo exterior en una carrera contrarreloj para salvar a sus seres queridos, y durante el proceso vivirán experiencias de todo tipo que les llevarán a madurar a pasos agigantados.
Este libro cuenta con más de 44.000 palabras y las ilustraciones corren a cargo de Xavi M. Montell, ilustrador que debuta en la editorial con este trabajo y que, como podéis comprobar en este mismo artículo, no tienen desperdicio alguno. Postapocalyptica: Última espera será publicado en los próximos meses, en formato físico y electrónico.