Product successfully added to your shopping cart
Y es que, según avanzamos en los aspectos de producción de la obra, más nos damos cuenta de su verdadera dimensión como herramienta para crear y jugar historias en el Siglo de Oro.
Pongamos algunos ejemplos de esos pequeños-grandes detalles que incluye el libro: aunque hay un capítulo completo dedicado a la sociedad de la época, Villa y Corte contiene decenas y decenas de recuadros destacados, repartidos por todo el libro, con estampas o consejos para el buen gobierno de las historias durante la España del siglo XVII. Gracias a esta información adicional descubriremos ángulos sorprendentes sobre la ambientación, mejoraremos nuestro vocabulario de época y recibiremos multitud de ideas para crear nuestros propios entremeses y comedias.
Respecto a los elementos diferenciales del Siglo de Oro, como podría ser el tratamiento de la esgrima, no solo dispondremos de un listado de armas actualizado respecto al ya nutrido catálogo que ofrecía Aquelarre, sino una revisión de las acciones que podemos hacer con ellas, con especial atención a las tretas de esgrima. Y no estamos hablando de un par de mecánicas adicionales para poner de relieve nuestra destreza con la ropera, sino de más de cuarenta tretas, cada una de ellas perfectamente explicada e imbricada en las mecánicas generales. Algo parecido sucede con los saberes de la alquimia, y, por supuesto, seguimos con el mismo nivel de detalle en los temas relativos a la magia y a la fe, que ofrecen multitud de posibilidades para los personajes e historias que quieran hacer uso de ellos.
Si a esto sumamos un amplio abanico de recursos históricos como enfermedades y venenos de la época, la descripción detallada de objetos útiles (desde protecciones a vestimenta, alimentación o instrumentos de germanía), el funcionamiento de la justicia, la religión, las dificultades de los viajes, las ciudades y los pueblos o las costumbres, nos encontramos con una valiosa obra que trasciende incluso su papel como juego de rol, y que deleitará a cualquier persona aficionada a la historia.
No se quedan atrás los artistas implicados en el aspecto visual de Villa y Corte. Gracias a su esfuerzo de documentación y a su inspiración (que no solo de grandes plumas vivió este siglo dorado, también de grandes pinceles), vamos a poder sumergirnos de lleno en la atmósfera de las ciudades y caminos de la época, tanto en sus rituales y objetos cotidianos como en el lado más peligroso y oscuro de este juego de roles, que viene acompañado de su dosis de azufre. Por no hablar del espectacular bestiario, que merecería un texto aparte.
Sirvan estas líneas, entonces, para compartir la pasión que el proyecto nos está despertando, y asegurarte que seguimos trabajando duro para que este Villa y Corte se convierta en un gran juego, de esos que podamos disfrutar durante varias generaciones.
Hasta volvernos a ver en esta Villa y Corte, quedad en paz.