Product successfully added to your shopping cart
Cada una de estas suposiciones se pueden ajustar para adaptar el juego a una experiencia parecida en Las ávidas espadachinas sáficas, ajustándola así a tus preferencias y el tipo de partida que quieras jugar. Hoy hablaremos de como ajustar la premisa que nos presenta el juego.
¿Y si... no hay magia?
Por defecto, los personajes de Las ávidas espadachinas sáficas son mágicas o poseen magia. La Embaucadora puede usar ilusiones para mantener la
máscara, la Devota puede obtener poderes sobrenaturales de su lealtad y la transformación de la Bestia podría ser el resultado de una bendición o maldición. Esta clase de magia da respuesta a acciones que los personajes pueden hacer según las normas u otorga cierta emoción que, como mucho, cambia ligeramente la posición narrativa del personaje y cómo este puede interactuar de forma creíble con la ficción.
De la misma forma, cada libreto puede interpretarse sin involucrar la magia, incluso los de las Brujas. Puede que la Bruja Elemental simplemente tenga un gran conocimiento o intuición sobre su entorno. Más que comunicarse o alterar el entorno con magia, usa su conocimiento, y puede que su macuto de hierbas y extractos, para conseguir resultados fantásticos.
¿Y si... no son ávidas?
En esencia, el juego asume que los personajes anhelan vínculos, pero esos vínculos no tienen que ser sexuales ni románticos. La acción de Seducir puede referirse a cualquier deseo físico o emocional, y puedes modificarlo para centrarlo en vínculos con la comunidad en vez de en sus deseos físicos o románticos. Esta variante puede ayudar a explorar de forma no romántica los vínculos con la comunidad, la familia elegida y las amistades cercanas a pesar de los obstáculos que plantean los conflictos emocionales de los personajes y el mundo exterior.
¿Y si... no hay espadas?
Si estás jugando a Las ávidas espadachinas sáficas, hay una alta probabilidad de que te gusten las historias sobre personas queer con espadas. Pero ¿por qué espadas? En pocas palabras, las espadas están ahí para invitar a los personajes a meterse en conflictos íntimos y emotivos, pero también como puente a los géneros y momentos históricos en los que las espadas estaban presentes pero las personas queer estaban dejadas de lado o invisibilizadas.
Pero, ¿qué pasa si no quieres espadas? Es tan sencillo como cambiarlas por una opción de combate diferente cuerpo a cuerpo. En tu campaña, tu personaje puede tener una labris, un hacha de doble filo que se convirtió en un icono lésbico a finales del siglo xx. Puedes usar diferentes estilos de combate sin armas o incluso luchar con proyecciones telepáticas. Estas variantes no requieren ninguna alteración en las reglas más allá de la estética, aunque por supuesto se pueden combinar con modificaciones en las reglas para destacar las singularidades de la premisa.
¿Y si... no son sáficas?
Te contaré un secreto: no tienes que jugar a ser lesbiana. El juego trata sobre temas que son comunes para todo tipo de personas marginalizadas en base al género y la orientación sexual, además expone sentimientos que van más allá de la experiencia queer. Si queréis jugar a ser ávidas espadachinas cishetero, nadie os lo impide, pero no te sorprendas cuando el juego vuelva a vuestros personajes queer.
Si te gustan los juegos de rol y las lesbianas caóticas incomprendidas con espadas, estás a punto de llegar al lugar adecuado.
Las ávidas espadachinas sáficas te ofrecerá todo lo que necesitas para desarrollar coqueteos, luchas con espadas y comentarios ingeniosos, usando una versión innovadora de la familia de juegos Powered by Apocalypse, donde cada tipo de personaje (en este caso nueve), se centra en un conflicto emocional concreto. Además, ofrece estrategias para adaptar al juego cualquier ambientación donde las espadas choquen y los corazones se desboquen.
¡Ya disponible en tu tienda habitual y en nuestra página web Las ávidas espadachinas sáficas!